COVID-19 ¿Cómo cambió la visita al dentista?

11 junio 2020

Los odontólogos son integrantes del grupo clínico que puede correr riesgos de contagio de coronavirus dada la proximidad en la atención de un paciente, que al mismo tiempo  puede ser en un portador de COVID -19 sin síntomas. Es por eso que las medidas de bioseguridad deben reforzarse debido a que en la actualidad gran parte del sector comercial se está reactivando y los ciudadanos deben retornar a las consultas dentales programadas. 

La Comisión Nacional de Salud del Gobierno chino y el Hospital Odontológico del Este de China desarrollaron una serie de recomendaciones para evitar la propagación del virus, en cuanto los odontólogos empiecen a normalizar sus labores:

1.- Evaluación del paciente. Los dentistas deben estar en la capacidad de identificar un caso potencial de coronavirus, incluso si el paciente es asintomático, mediante una serie análisis técnicos y preguntas.

2.- Lavado de manos. Una de las vías más frecuentes para la trasmisión del virus ha sido el contacto directo. Por eso, tanto el personal del centro odontológico como el paciente deben realizarlo frecuentemente, incluso en cuanto el paciente ingresa al dispensario. 

3.- Medidas de protección personal en la clínica dental. En este caso el médico debe reforzar sus medidas de bioseguridad, que consisten en: 

  • Gafas de protección ajustadas a la cara con goma. 
  • Pantalla facial.
  • Gorro quirúrgico desechable.
  • Mascarilla.
  • Batas impermeables desechables.
  • Guantes.

Estas barreras de protección deben usarse sea para pacientes rutinarios como para emergencias.

4.- Enjuagues bucales antes del procedimiento. Según la Comisión Nacional de Salud del Gobierno chino, el virus es vulnerable a la oxidación por eso aconseja usar elementos como  el peróxido de hidrógeno al 1% o povidona yodada al 0,2% para realizar los enjuagues previo a la intervención.

5.-  Turbinas y piezas de mano con sistema de anti retracción. Estos artículos evitan una contaminación cruzada por conductos de aire contaminado. Se trata de implementos que favorecen la desinfección de las estructuras.

6.- Desinfección de todo el consultorio dental. Hay que desinfectar  sillas, muebles, escritorios, pasamanos, perillas de puertas, entradas de ascensor, todo; de preferencia después de la visita de cada paciente puesto que podríamos desconocer si son positivos o no.

7.- Instrumentos. Es conocido que en los consultorios dentales los instrumentos para realizar los procedimientos siempre son desinfectados, eso no debe cambiar e incluso realizarlo con mayor frecuencia; además, mantenerlos en un lugar  para moverlos solo cuando vayan a ser utilizados.

Al tener conocimiento de estas medidas básicas, tanto el paciente como el profesional pueden protegerse y al mismo tiempo mantener una dinámica de bioseguridad que evitará un contagio.

Por otra parte, el odontólogo Mauricio Morales, aconseja que los ciudadanos deben continuar visitando a su dentista pues está completamente seguro que el gremio de profesionales cumple con todos los parámetros de seguridad para evitar cualquier tipo de contratiempos, además invita a todos a aportar con nuevas recomendaciones. 

Por último, es importante mantener la seguridad en todo momento, esto implica el uso individual de crema, cepillos e hilos dentales, así como toallas y demás utensilios de limpieza.