¿Cómo hablar con los niños sobre el Coronavirus para que este prevenidos?

Con base en la evidencia disponible, los niños no corren mayor riesgo de contraer el COVID-19 que los adultos. Si bien algunos niños y bebés han contraído el virus, la mayoría de los casos conocidos a la fecha son en adultos.
Es posible que los niños sientan preocupación por la posibilidad de que ellos, sus familias y amigos se enfermen de COVID-19. Los padres, miembros de la familia, personal escolar y otros adultos de confianza pueden cumplir un rol muy importante a la hora de ayudar a los niños a comprender lo que escuchan de una manera honesta, precisa y que minimice sus temores y ansiedad.
Datos acerca del COVID-19 para conversar con los niños
Procure que la información sea sencilla y recuérdeles que las autoridades de salud están trabajando mucho para que todos estén a salvo y sanos.
Opciones de cómo explicarles lo que está sucediendo:
- COVID-19 es la forma abreviada de «enfermedad del coronavirus 2019». Es un virus nuevo y los científicos y médicos siguen aprendiendo acerca de él.
- Durante el último tiempo, el virus ha enfermado a muchísimas personas. Los científicos y médicos están intentando aprender más para poder ayudar a las personas que se enferman.
- Los médicos y expertos en salud está trabajando arduamente para ayudar a las personas a mantenerse saludables.
Tome medidas para proteger a los niños y a las demás personas
Ayude a detener la propagación del COVID-19 tomando las medidas que todos deberían tomar para mantenerse sanos. Enseñe a sus hijos para que hagan lo mismo.
- Lavarse las manos con frecuencia con agua y jabón o usar un desinfectante de manos a base de alcohol.
- Evitar el contacto con personas enfermas (que tosen o estornudan).
- Mantener distancia entre sus hijos y las demás personas fuera de su casa. Mantener a los niños al menos a 2 metros de distancia de otras personas.
- Los niños de 2 años de edad en adelante deben usar una cubierta de tela para la cara que cubra la nariz y la boca en entornos públicos cuando no es posible mantener el distanciamiento social. Es una medida de salud pública adicional que las personas deben adoptar para reducir la propagación del COVID-19, además de (y no en lugar de) las otras medidas preventivas cotidianas mencionadas arriba.
- Limpiar y desinfectar a diario las superficies que se tocan con frecuencia en las áreas comunes de la casa (como mesas, sillas con respaldo duro, manijas de las puertas, interruptores de luz, controles remotos, manijas, barandas, escritorios, inodoros, lavamanos y lavaplatos (fregaderos).
- Lavar los artículos como los juguetes de peluche lavables, según corresponda. Seguir las instrucciones del fabricante. De ser posible, hay que lavar los artículos usando la temperatura de agua máxima permitida y secarlos por completo. Se puede lavar la ropa de una persona enferma con la del resto de los integrantes del hogar.
Enseñe y refuerce las medidas preventivas cotidianas
- Los padres y cuidadores desempeñan un rol importante a la hora de enseñar a los niños a lavarse las manos. Explíqueles que el lavado de manos puede mantenerlos sanos y evitar que el virus se propague a otras personas.
- Sea un buen ejemplo: si usted se lava las manos con frecuencia, es más probable que ellos hagan lo mismo.
- Convierta el lavado de manos en una actividad familiar.
Manejo del estrés
No todos los niños y adolescentes responden al estrés de la misma forma. Estos son algunos cambios de conducta a los que debería prestar atención:
- Preocupación o tristeza excesiva
- Hábitos de alimentación no saludables
- Hábitos de sueño no saludables
- Problemas de atención y concentración
Ayude a su hijo a mantenerse activo
- Haga pausas para realizar actividades en interiores (como pausas para hacer ejercicios de estiramiento o para bailar) a lo largo del día para ayudar a su hijo a mantenerse saludable y concentrado.
- Realicen actividades prácticas, como rompecabezas, pinturas, dibujos y manualidades.
- También puede usar el juego independiente en lugar del aprendizaje estructurado. Aliente a los niños a construir un fuerte con sábanas o practique los números al apilar bloques.
- Practiquen habilidades de escritura y gramática al escribir cartas a los miembros de la familia. Esta es una excelente manera de conectarse y limitar el contacto directo.
- Comiencen un diario con su hijo para documentar este momento y hablen sobre la experiencia compartida.
- Use audiolibros o vea en bibliotecas virtuales eventos de lectura o transmitidos en vivo.
Ponga en práctica el distanciamiento social
La clave para desacelerar la propagación del COVID-19 es limitar el contacto tanto como sea posible. Mientras estén suspendidas las clases en las escuelas, los niños no deben reunirse con niños de otras familias. Si los niños juegan fuera de sus casas (que no es lo más recomendable), es esencial que se mantengan a una distancia de 2 metros de cualquier persona que no viva con ellos.
Para ayudar a los niños a mantener sus vínculos sociales durante el periodo de distanciamiento social, ayúdelos a realizar llamadas telefónicas o chats de video supervisados con sus amigos.